Tener una casa con las puertas de interior pintadas de colores puede ser la solución perfecta para aquellas personas a las que les guste una decoración colorida y alegre.
No es necesario tener buenas dotes artísticas, puesto que con un poco de cinta e imaginación se pueden conseguir puertas pintadas de colores con muy buen resultado.
Hay muchas posibilidades: desde pintarlo todo de un mismo color hasta pintar solo el canto de la puerta. Dependerá de si queremos hacer un pequeño detalle que aporte algo de color o si queremos convertir a la puerta en un objeto llamativo.
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14 puertas de interior pintadas de colores
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Empezamos con esta idea sencilla pero llamativa. Para pintarla así necesitarás colocar primero un trozo de cinta en diagonal asegurándote de que se pega bien a cada tramo de la puerta. Pinta la parte inferior y retira la cinta.
Fuente: a beautiful mess
2.
Con la misma técnica pero yendo un paso más allá tienes esta puerta pintada de azul y blanco. Es un diseño muy original.
Fuente: diy show off
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Si prefieres que el color apenas tenga presencia esta es una de las soluciones. Recrea formas geométricas para decorar la puerta.
Fuente: stars for streetlights
4.
La pintura de pizarra también sirve para las puertas. En este caso una con tonalidad rosa queda de maravilla. ¡Además podrás escribir en ella utilizando tizas!
Fuente: our city lights
5.
Una idea realmente interesante es pintar la puerta acorde con las paredes. En este caso han optado por pintar de azul la parte inferior.
Fuente: deuce cities henhouse
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Las puertas de granero también son perfectas para pintar. Además tendrás el contraste del color negro de los raíles metálicos, por lo que podrás buscar un color que combine con él.
Fuente: pinterest
7.
Aquí volvemos a ver una puerta que no ha sido pintada por completo pero con un añadido: se a pintado también el perfil de la puerta.
Este efecto es muy interesante, ya que sólo se verá cuando la puerta está abierta.
Fuente: i spy diy
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Al igual que vimos antes cómo se pintaba una puerta con un trozo de cinta puedes dar un paso más y combinar dos colores.
Fuente: one kings lane
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El amarillo es un gran color para pintar estas puertas interiores. A pesar de que puede parecer un color demasiado llamativo, si eliges una tonalidad pastel encajará muy bien con la decoración del hogar.
Fuente: sf girl
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Puedes combinar tantos estilos como quieras. Si al cabo te cansas solo tendrás que volver a pintar.
Fuente: camille styles
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Puedes probar tantas formas geométricas como desees.
Fuente: honey were home
Esta idea me parece especialmente interesante. Consiste en dejar el aspecto de una puerta antigua pero combinándolo con una restauración en forma de círculo.
Es una puerta llena de personalidad.
Fuente: domino
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Si te gustan los colores fuertes no dudes en arriesgar. La puerta, al ser un elemento abatible, cuando esté abierta no será tan visible y podrás utilizar en ella colores más llamativos.
Fuente: coastin
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Fuente: tamalikainen parketti
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Si quieres dar un salto de calidad, además de pintar las puertas, puedes cambiar los pomos. Conseguirás un aspecto muy elegante.
Fuente: one kings lane
Los diseños son muy variados. Se puede pintar la pared junto con la puerta siguiendo las mismas lineas. O utilizar los mismos colores de algún mueble u objeto que haya en la misma habitación, y así darle continuidad a la decoración.
Lo que está claro es que tener las puertas de interior pintadas de colores hará que tu vivienda sea de lo más original. Y si te cansas de cómo están pintadas puedes cambiarlas por una idea distinta. Seguro que cuando hayas pintado una puerta por primera vez las siguientes veces te resultará mucho más fácil.